TERCIO VIEJO DE LOMBARDÍA (1525 - 1560).

El grupo renacentista de la Asociación Napoleónica Valenciana recrea a los hombres de armas de los ejércitos imperiales en un amplio periodo histórico que abarca, desde la batalla de Pavía (1525) y la Guerra de Espadán (1526), pasando por las primeras compañías originarias de los Tercios en 1534, durante el reinado de Carlos I de España y V de Alemania, hasta el año en el que recibe su denominación como Tercio de Lombardía (1560), ya en tiempos del monarca Felipe II.

 

La fecha de creación del Tercio de Lombardía fue, aproximadamente, en 1534. Su primer maestre de campo fue Sancho de Londoño, formando una tropa de unos 2.200 hombres distribuidos en 4 compañías de arcabuceros y 6 de piqueros. Participó en las guerras de Italia (1511-1544) en la toma de la Bastida y las batallas de Vicenia, Pavía y Cerizola. En 1546 luchó en el rio Elba y en 1555-1556 en la defensa de Volpiano y en Ponte Stura en Italia.

La fecha de creación del Tercio de Lombardía fue, aproximadamente, en 1534. Su primer maestre de campo fue Sancho de Londoño, formando una tropa de unos 2.200 hombres distribuidos en 4 compañías de arcabuceros y 6 de piqueros. Participó en las guerras de Italia (1511-1544) en la toma de la Bastida y las batallas de Vicenia, Pavía y Cerizola. En 1546 luchó en el rio Elba y en 1555-1556 en la defensa de Volpiano y en Ponte Stura en Italia.



 

En 1537, se organizó el Tercio Ordinario del Estado de Milán, que en el reglamento de 1560 recibió el nombre de Tercio de Lombardía, una circunstancia que ha provocado confusiones en el seguimiento de los historiales de este Tercio y el de Londoño. Tuvo por sobrenombre "El Señor" o "Tercio de los Señores".

                    

En 1609 el Tercio Viejo de Lombardía fue reclamado por Felipe III para sofocar la rebelión de los moriscos de Cortes de Pallás (Valencia), contando con el apoyo de la Milicia Efectiva de la Villa Real de Algemesí (grupo también recreado por la Asociación Napoleónica Valenciana ). Tras varios meses de combates las tropas terminaron con la rebelión y capturaron a "Turigi", líder de los moriscos.

HOMBRES DE ARMAS DEL TERCIO VIEJO DE LOMBARDÍA 1525-1560

   

PIQUEROS
Piqueros en posición de armas caladas contra caballería (a la izquierda) y en posición de descanso. Las primeras líneas (picas armadas) llevaban mucha más protección para recibir el choque de las picas enemigas o los ataques de caballería. El resto de las líneas (picas secas) portaban tan solo una espada además de la pica y en lugar de casco una simple parlota de tela. Los piqueros formaron el grueso de los ejércitos europeos hasta finales del siglo XVII, y fueron disminuyendo ante el empleo masivo de las armas de fuego en la infantería.

 

           

ARCABUCEROS
Los arcabuceros, protegidos con coraza y morrión o capacete, y armados con arcabuz, espada y daga, eran una de las unidades más temidas y efectivas de los Tercios Españoles en los siglos XVI y XVII.

 

           

RODELEROS

Rodeleros con sus escudos circulares de tamaño medio para manejar mejor la espada. También se utilizaban escudos de menor tamaño, como el broquel. Los rodeleros eran soldados bravos, acostumbrados a combatir cuerpo a cuerpo con el enemigo, y muy diestros en el manejo de la espada.

 

  


ALABARDEROS

Muy empleada en la Edad Media contra las armaduras de los caballeros, a mediados del XVI la alabarda cayó en desuso en el combate, pero se siguió utilizando como distintivo de grado y también como arma característica de la Guardia Real hasta nuestros días. En la imagen pueden observarse varios tipos de alabardas, gujas y hachas de brecha.

   
 

CAJAS DE GUERRA

Tambores de los Tercios. A la izquierda y en el centro dos veteranos, y a la derecha un niño de 14 años, edad con la que ya podían entrar a formar parte de las tropas. Los niños no podían utilizar espada, tan solo una pequeña daga. Además de los tambores, también habían otros niños, los llamados "mochileros", encargados de portar el material y pertenencias y servir a los soldados mas pudientes.

 

                           

"DOBLESUELDO" Y BALLESTEROS

A la izquierda un "doblesueldo", llamados así por su difícil y peligroso cometido: con su larga y pesada espada combatía entre las picas de ambos bandos para intentar romper las del enemigo y matar al mayor número de adversarios, por lo que su paga era el doble que el resto de compañeros. A la derecha, un ballestero con su arma capaz de perforar una coraza en distancias cortas. A mediados del siglo XVI estas armas tan populares en la Baja Edad Media fueron cayendo en desuso ante el avance de las armas de fuego.

 

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